FLORES DE VIENTO Y PAPEL. HAIKUS


Alice Wagner Ortuño


FLORES DE VIENTO Y PAPEL

HAIKUS



Editado por ALAS en la colección de poesía Wallada con la colaboración del Instituto Andaluz de la Mujer. Málaga, 2007



Anémona, sí
perseverancia fluida,
gota de lluvia.




Silba la vida
con fuegos interiores
el dulce trino.




Haz prodigioso
del pensamiento rosa
ave arrogante.



Dulce compasión
cantando a las auroras
tu fuego interno.




Ave temida
lento envenenamiento
la fea arrogancia.




Cómo un féretro
de amanecer doliente
el alma escucha.




Viejo rijoso
urdía vendavales
estando en sombras.




Delfín de azahares
alas de transparencia
resina viva.[1]




Paso silente
majestuoso porte
gata de flores.[2]





Árbol que llora
no siempre su alegría
gotea vida.




Desmelenada,
la lucha que perturba
sigue su danza.[3]




Fuente de barro
desliza el agua clara
acuna sueños.



Pétalo blanco,
esqueleto del aire,
humo de incienso.




Negras tijeras
de primavera anuncio
las golondrinas.




Savia de vida
recio tronco en sus ramas
dulces abrazan.




Frescor bruñido
candela que ilumina
que a penas duerme.




Flor desmayada
de abstinencias y ayunos
rosa en un vaso.[4]




Del alimento
sabiduría firme
espiga verde.


Sólida runa
blanco elixir exhalas
verde misterio.[5]




La mariposa
prendada de su tiempo
vive el momento.




Año de ausencia
deambular perdido
las noches blancas.



De incertidumbres
el faro que ilumina
secretos guarda.




Seres perdidos
besos de vagabundo
buscaban sueños.




Brusco el sonido,
crepitar de las hojas
la vida aquieta.




[1] A Mari Nieves.
[2] A Lola y al gato del Guggenheim.
[3] A Inma.
[4] A Rosa.
[5] A Roberta.